Designar un año universal para la historia de la humanidad

¿En que año estamos exactamente? Según el calendario gregoriano, estamos en el 2.019, pero este número cambia según la religión y/o cultura. De esta manera encontré el vídeo A New History for Humanity – The Human Era del canal de youtube Kurzgesagt – In a Nutshell, donde presentaron la propuesta de Cesare Emiliani, la cual relacionaba el año cero con la primera construcción que dio indicios de que comenzó la era civilizada del hombre. Esta edificación correspondió al primer templo creado por un pueblo hace aproximadamente 12.000 años atrás, llamado Göbekli Tepe, el cual se encontró al sur de Anatolia (actual Turquía). La propuesta de Cesare Emiliani era la implementación de un calendario holoceno para ser un símbolo de unión de todas las culturas actuales, independiente de su religión, y que permitiera apreciar todo el recorrido hecho por la humanidad y su crecimiento como civilización; dando por resultado que actualmente nos encontraríamos en el año 12.019 (vean el vídeo para que aprecien el cronograma bajo el calendario del holoceno).
Leyendo por internet respecto a esta propuesta, estuve de acuerdo tanto con sus factores positivos y negativos. Respecto a los primeros, y como se mencionó anteriormente, permite una mejor apreciación de la evolución de la sociedad a lo largo del tiempo junto con sus grandes avances que revolucionaron en su tiempo respectivo, además de facilitar una fecha relativa agregando diez mil años a la fecha actual, la cual también es relativa, pues el calendario gregoriano está sostenido según el nacimiento de Cristo, cuya datación se ha comprobado que corresponde aproximadamente 7 años antes a lo que creemos o acostumbramos.
Sin embargo, los contras del calendario holoceno son que, a pesar de querer unir las distintas culturas, independiente de su origen étnico o creencia religiosa, todavía mantiene por referencia técnica el nacimiento de Cristo, lo cual es una de las vertientes religiosas del mundo actual. Otro aspecto a considerar es que estaría basado a una edad relativa, pues esta coincide con el final de la última glaciación, fecha que está comprobándose en su precisión constantemente, por lo que no habría una designación real por medio de esto. Ademas, quiero sumar que el mismo calendario holoceno se sostiene respecto a un templo descubierto recién 1994, por lo que cabe también la posibilidad de seguir encontrando asentamientos humanos que den signos de su evolución para caracterizarlos como civilización ancestral, los cuales pueden ser del mismo período o, incluso, ser más antiguos a Göbekli Tepe.
Interesada en hablar sobre esto, lo comente con mis compañeros de Licenciatura en Historia, quienes les llamó la atención la idea del calendario holoceno, pero no hubo una aprobación respecto al mismo, surgiendo una nueva propuesta dicha por uno de ellos, la la búsqueda de algún hecho que involucre un impacto a escala global y que éste sea considerado como nuevo año cero. Si uno se pone a analizar esta idea, tendría que involucrar a todas las naciones, tanto de Occidente como de Oriente (técnicamente el calendario gregoriano es una fecha de referencia occidental principalmente), siendo el escenario que coincide con esto son las Guerras Mundiales, las cuales tuvieron un fuerte impacto en la sociedad actual y a todos los países que se encontraron con este conflicto en el siglo pasado, pero esto sería un inicio bajo una connotación negativa de la historia de la humanidad.
Sinceramente esta propuesta del calendario holoceno es llamativa cuando uno la conoce y quisiera saber la opinión de más personas respecto a este tema, estoy abierta a recibir comentarios y si uno posee algún libro sobre ello, feliz lo acepto como recomendación para darme una lectura nueva.
Constanza Bustos